Interconsultas y su uso, además un poco de risa…
Los médicos realizamos interconsultas. Ocasionalmente solicito a mis pacientes que acudan con un colega de otra especialidad. Esto porque necesito saber cómo podría interactuar la prevención o recuperación que estoy implementando con otras áreas.
Algunos pacientes se frustran por ello. Consideran que éstas acciones son una estratagema de los médicos para hacerse favores unos a otros respecto a consultas.
Esto no es cierto. Un cuerpo humano reacciona de diferentes maneras a los químicos que lo componen. Las medicinas son compuestos químicos adicionales. Mismos que son ingresados en el cuerpo de manera oral, venosa o intramuscular, por nombrar algunas formas.
Estos químicos externos ocasionarán consecuentemente diversas reacciones químicas también que afectarán el comportamiento del cuerpo. Al afectar el comportamiento de cuerpo, se afectará el desempeño y estado general del mismo.
Algunos medicamentos reaccionan de manera adversa al interactuar entre sí al ser administrados al paciente. Por su parte, el consumo de algunos medicamentos por sí solos pueden predisponer al paciente a determinadas condiciones si determinados medicamentos son prescritos.
No hay una manera fácil, sencilla o simple de poder determinar ésto. La supervisión médica es prioritaria. Como he dicho a lo largo de todos los post de éste blog: El único autorizado a practicar medicina es el médico.
Acudir con practicantes de terapias alternativas es efectivo como un efecto placebo; eso es, el único bien que ocasiona es mental. Un familiar o un amigo puede jurar que acudir con éstos practicantes resuelven los problemas… Antes de acudir, piense: Arriesga usted su vida. ¿Está dispuesto?
Por ello es importante tener en cuenta diversas áreas y múltiples factores. Sin embargo, es muy importante que si usted, en algún momento, considera que el médico de interconsulta no es bueno. Hágaselo saber al angiólogo que le esté tratando; lo mismo si le quedan dudas después de la interconsulta.
Pero, por ahora, ríase de las interconsultas. . .